La coordinadora de la investigación internacional ACT21S, Esther Care (The University of Merbourne) ha escrito un artículo cuyo título es “Assessing 21st century skills” en el que describe el enfoque teórico del proyecto y cómo pueden mejorar las habilidades de los alumnos cuando los docentes incorporan tareas para que sean resueltas en equipo.
1. Deben ser medibles y observables.
2. Nos debe permitir tener indicadores que se deriven del comportamiento de los alumnos tras la realización de programas colaborativos, y que puedan ser valorados por los profesores en el aula.
3. Que estas habilidades puedan ser aprendidas.
La resolución de problemas de manera colaborativa es una interesante herramienta docente que desarrolla habilidades sociales y cognitivas, ambas observables, medibles y pueden aprenderse.
En el proyecto se define la colaboración como una actividad en la que se trabaja hacia un objetivo común, y para que los docentes puedan valorar la progresión de sus alumnos hemos traducido las rúbricas que se utilizan en esta evaluación. De esta manera el docente puede mejorar el trabajo colaborativo (el proceso de enseñanza-aprendizaje del aula) y por supuesto, valorar los resultados en los alumnos.